Guía básica de ciberseguridad para empresas de comercio electrónico

La ciberseguridad para empresas de comercio electrónico (y de cualquier otro sector, dicho sea de paso) se ha convertido en una prioridad ineludible, ya que se trata del riesgo más importante al que te enfrentas si te dedicas al eCommerce, al comercio físico o (por ejemplo) a la producción de huevos fritos envasados al vacío, negocio este último que, al parecer, tiene un brillante futuro. Sobre la calidad de ese futuro, mejor no hablamos que se me ha acabado el Almax.

La ciberseguridad para empresas no depende del tamaño

Pero si hablamos de ciberseguridad para empresas de comercio electrónico, no hablamos de futuro sino de presente, y muy presente. La cosa es simple: si el negocio deja de ser físico para ser online, los delincuentes hacen lo mismo. Menos riesgo para su integridad física, más facilidad para cubrir el rastro y en lugar de robar en tiendas de una en una lo pueden hacer de cien en cien, y además en todo el mundo. Por eso, los ciberataques se han convertido en el riesgo nº 1 para cualquier empresa, sea del tamaño que sea. 

Insisto en esto del tamaño porque una idea muy extendida es la de «nosotros somos demasiado pequeños para despertar el interés de los ciberdelincuentes». Imagino que quien piensa así, si tiene un negocio físico, prescindirá de gastar dinero en alarmas, rejas, cámaras de seguridad o lo que sea. Total, si mi tienda es pequeña nadie va a querer robarme, ¿no?

Cuando hablamos de ciberriesgos todos nos imaginamos una escena como la que aparece en las películas o series de televisión: Una organización con un nombre tipo SPECTRA o algo así, en la que un grupo de hackers vestidos de negro y con gorros de lana se sientan delante de unos equipazos de la muerte con 6 pantallas mientras teclean frenéticamente líneas de código hasta que uno de ellos dice ¡Estoy dentro! y transfiere 10.000 millones de dólares a una cuenta en un banco de Kuala Lumpur para después dejarlo todo y salir corriendo en un coche de alta gama, perseguido por un pseudo James Bond en las calles de París. No seré yo quien afirme que esas organizaciones no existen, pero desde luego que el 99% de los ciberdelincuentes no tienen ese perfil. 

Para continuar leyendo, pulsa aquí.

También te podría gustar...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *